domingo, 27 de febrero de 2011

Una plaga publicidad por telefonos celulares

PROFECO ACTÚA EN CONTRA DE LA PUBLICIDAD
TELEFÓNICA


Al finalizar
febrero, vencerá la inscripción de 34% de los números telefónicos en el Registro
Público de Consumidores.

 Los consumidores pueden denunciar a empresas
que llamen o envíen mensajes de texto para publicar productos o
servicios. 

México, D. F., a 24 febrero de 2011. Este mes vencerá la inscripción de 34% de los 162, 809 números telefónicos incluidos en
el Registro Público de Consumidores (RPC).
La
Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) invita a renovar gratuitamente el
servicio que permite protegerse de llamadas y mensajes de texto publicitarios.
El RPC es una herramienta mediante la cual los consumidores registran su número telefónico (de un aparato fijo, móvil o fax) a una lista que los proveedores deberán consultar
para no molestar a los inscritos con publicidad no deseada.

Para renovar el número telefónico o registrarse por primera vez en el RPC, hay que llamar al
9628 0000 en el Distrito Federal, Guadalajara o Monterrey; o al 01 800 962 8000
larga distancia sin costo desde el resto de la República. La llamada debe
realizarse desde el teléfono al cual no se desea recibir la publicidad.
Al llamar, el consumidor sólo debe elegir el sector o sectores de los cuales no quiere recibir
publicidad (comercial, turístico y/o telecomunicaciones). El trámite no tarda
más de un minuto, es automático y con atención las 24 horas, todo el año. La
inscripción tiene vigencia de tres años, pero se puede cancelar o modificar la
inscripción del número en cualquier momento.

Si un consumidor sigue recibiendo llamadas, mensajes de texto o multimedia con fines
publicitarios a partir de un mes después de registrarse en el RPC, puede
denunciarlo ante Profeco en el Teléfono del Consumidor (5568 8722 desde el DF y
área metropolitana; 01 800 468 8722, larga distancia sin costo desde el resto
del país). Profeco puede multar hasta con un millón 272 mil pesos a las empresas
denunciadas por los consumidores.

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Se admiten, madrazos, chingadazos si son justos y merecedores. Quien este libre de pecado que tire el primero