Eduardo Ortiz León
Caborca, Sonora.- Un problema para agentes de seguridad publica es el que diariamente se presenta con personas indigentes y alcoholizadas que no tienen hogar o familiares que los atiendan en esta ciudad.
Diariamente los agentes tienen que lidiar con estas personas y trasladarlas a las celdas municipales por la comisión de delitos menores como es el hacer sus necesidades en la vía pública o molestar a transeúntes quienes los reportan a la jefatura de policia que esta obligada por ley a atender este tipo de reportes y retirar estas personas de la vía pública.
LO anterior provoca gastos de combustible y horas hombre a la jefatura que muy bien pueden realizar una labor mas efectiva de vigilancia ante la no existencia de instituciones de ayuda especializada en este tipo de persona tal y como existen en otros países porque en el nuestro simplemente no existen.
Esta situación hace que los agentes no tomen en serio su trabajo al tener que trasladarlos a las celdas municipales para que ya que les pase la borrachera sean soltados pues su delito no amerita nada mas que horas de arresto o el pago de una multa económica, además de ser objeto de las burlas de compañeros cuando les toca llevarlos.
De nada sirve que existan centros de ayuda contra las adicciones como el inaugurado pomposamente por el gobernador hace unos días si estas instituciones son solo un enjambre mas de burócratas encerrados en sus cubículos y los indigentes y débiles mentales pululan por toda la ciudad in que haya una institución que los socorra y los que pagan el pato son los agentes municipales.
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Se admiten, madrazos, chingadazos si son justos y merecedores. Quien este libre de pecado que tire el primero