Don Raul Figueroa, 78 años y contando

Eduardo Ortiz León

Caborca, Sonora.- Supe de su existencia porqué alguien compartió una nota en el Facebook de mi esposa, que se publicó en un portal de internet, sobre como este señor a sus 70 y tantos años, trabaja diariamente vendiendo paletas, actividad que realiza desde hace ya unos 40 años, mas de la mitad de su vida y suficiente para que el gobierno mexicano le diera una pensión por jubilación sin embargo carece de ese beneficio.

Es uno de millones de mexicanos que viven en la miseria, en una casucha con piso de tierra, techo de cartón y plásticos agujerados por las inclemencias del tiempo y su antigüedad, paredes de ladrillos, cemento o tierra, construidas a diferentes tiempos y a como se podía.

Fui a su casa para ver como  vive y llevarle un poco de alimento para el y su esposa que vive en una silla de ruedas debido a los achaques de su edad y enfermedades no atendidas o si lo fueron, pues mal atendidas o falta de cuidado en seguir las recomendaciones médicas, ya sea por no poder comprar los medicamentos al ser mas urgente alimentarse y después curarse.

El techo un puñado de hules viejos y agujerados

Al llegar a su casa, don Raúl paseaba por el patio de su solar donde una choza de lámina de cartón al frente comparte espacio con su casa, en ella vive una hija suya madre soltera y un hijo de 11 años de edad, ella enviudo al fallecer su esposo hace ya años y se sostiene de lo que vende en un viejo triciclo, según me dijo don Raúl.

Y como le hace usted, le digo, pues ahora no salí a trabajar, esperando a ver si viene alguien con ayuda, dice, es que ayer salí a traer una carruchada de leña y me dijeron que vino alguien en una camioneta buscándome y yo no estaba, dicen que parecían del DIF, sabe, dice no han vuelto, ya fue al DIF? Le pregunto, si contesta, despacio, y le ayudaron? No dice, no me han dado nada ya  he ido dos o tres veces, tiene seguro? Nombre, hay me anda ayudando una licenciada que vive en la colonia El alto, mija trabaja con ella y me anda consiguiendo el registro para apuntarme en el seguro popular, siquiera para conseguir medicinas, pa´ la viejita, dice.

El fogón

Toda la vida se ha dedicado a vender paletas?, no he hecho de todo, trabaje 8 años en el municipio, de tirabichis, trabajé también en recursos, que recursos? En el agua potable, y aquí quien vive, le pregunto señalando la choza de cartón, vive una hija mía, y donde está? Anda vendiendo, que vende? Pues de todo, duros, anda en un triciclo vendiendo, a ella se le murió el esposo, desde que estaba chamaquito el niño, se enfermó de cardiaco creo, en Hermosillo se murió, ella tienen 30 años y su hijo, el tiene 1, Noel hijo de usted? El tiene como 34, y en que trabaja? En lo que sea en lo que caiga, ¿no se va de burrero, el? No, contesta de volada riéndose, mientras un perrito amarrado en un palo clavado en el patio ladra y gruñe, queriéndole agarrar las piernas, nombre que va ir, los gringos no nos quieren ni pintos a nosotros ya tengo 50 años viviendo aquí, ¿y usted nunca se fue de burrero? No entonces no  había nada, yo viví en la frontera en Agua prieta, antes de caer aquí, es de ahí usted? No me llevaron muy chiquito, yo nací en Cumpas, ahí me crie en Agua prieta, toreando los gringos ahí me chotíe, ya la última vez puro perder el tiempo, antes te tiraban por Reinosa, por León Guanajuato, por donde quiera, la última vez que me salí me cuajé, nomas con otro nombre por allá por Mexicali, ya no me acerqué a la frontera ¿A qué? Aquí me quedé.

Ya después caí en Caborca, viví en un montón de ranchitos antes de que los Monreal compraran allá en el cerrito donde estaban las caballerizas viejas, donde el cayo Salcido, pa acá en sabe donde, pues no le entendí, allá por la zona vieja, todo eso viví, ay vine a dar aquí, nos quedamos.

¿Usted es quien hace la comida? Nosotros ay nos turnamos, la bañamos, lavamos la ropa, dice. Refriéndose a su esposa, un día se queda el(su hijo) otro yo nos turnamos, lavamos, con la cocina y todo, pa´  verla en la noche, tenemos que cambiarla de todo a todo, ella no puede pobrecita, con doctores ni modo de llevarla ya, exclama desalentado,  ni doctores le curan esa enfermedad ya, hay nomas pa los dolores, ahora ya no puede andar ni en esa cosa, dice señalando una vieja andadera de aluminio, ya tiene todas las manos engarruñadas, las rodillas, todo. ¿Dónde la conoció?  Alla p´al lado de la radio del pepe, allá, vivían ellos, ella es de La cienega, a a lla por donde estaba la mina ¿ Se casó o se la robó?  Me la robé, me robó ella, ya no me acuerdo dice riéndose, alegre ante el recuerdo, ¡ Entonces si caminaba! ¿No?  pos si, pero ya ve todo se va acabando, ja, ja, todo por servir se acaba.

Me despido y ay se queda el viejito, no sin antes agradecer la pichurrienta y pequeña despensa que le llevé, espero seguir haciéndolo, me retiro , y pienso, cuantas gentes como don Raúl, trabajaron y van dejando su vida en la lucha diaria para sostenerse y hacer lo mismo con la familia, y al término de su vida útil, que marcan las leyes, viven chingándole todavía, pues nuestro injusto sistema no hace mas de lo que debe de hacer cuando como ellos nunca tuvieron prestaciones , que les  permitiera disfrutar de una vejez, tranquila, sin sobresaltos, donde no tengan que preocuparse, por el que comerán mañana, si hará frio o calor, pues se tiene lo necesario, sin embargo eso es un sueño, que nunca se llevará a cabo, mientras sigamos teniendo un gobierno que sirve solo a los intereses de los poderosos, de los que mas tienen y que no desean siquiera un pedazo de pan enmohecido o duro, pues en su vida todos sus caprichos y deseos han sido satisfechos, mientras millones de seres pasan, hambre, miseria, deshidrataciones, diarreas, muertes debido al frio, enfermedades por no tener seguro, solo queda hacer lo que se pueda por que esto cambie, y un manera es conocer de las injusticias y pregonarlas, no solucionamos ni es nuestra obligación, solucionarles las vidas a estas personas que carecen de oportunidades, pero que chingado que mas puedes hacer?  Alimentando o dando a uno, hay miles en igual o peor situación.

8.2 millones de mexicanos tienen 60 años o más, serán 22.2 millones dentro de 25 años

• El proceso de envejecimiento en México tomará la mitad de tiempo que en

los países más desarrollados

• En 2034 habrá la misma cantidad de niños que anciano

De acuerdo con estimaciones del Consejo Nacional de Población (CONAPO), actualmente

residen en México 8.2 millones de personas de 60 años o más, en 2030 se espera que sean

22.2 millones y para la mitad del siglo alcanzarán, según lo previsto, 36.2 millones. Esto se

reflejara en el aumento de las proporciones de adultos mayores en las próximas décadas: En

2005 la proporción de adultos mayores es de 7.7 por ciento; se incrementará a 17.5 por ciento

en 2030 y a 28.0 por ciento en 2050.

Este proceso de envejecimiento demográfico ocurrirá en nuestro país en un lapso bastante

menor al observado en países más desarrollados y en un contexto socioeconómico menos

favorable. De acuerdo con la revisión de 2002 de las estimaciones y proyecciones de la División

de Población de las Naciones Unidas, la proporción de población envejecida para las regiones

más desarrolladas del mundo aumentará de 11.7 por ciento en 1950 a 32.4 por ciento en 2050.

Así, el proceso que a los países más desarrollados les ha tomado un siglo (incrementar la

proporción de personas de la tercera edad en México, le llevará la mitad de ese tiempo)