Eduardo Ortiz León
Caborca, Sonora.- La atención a llamadas para avisar de un ilícito o emergencia pueden llegar a ocasionar alguna tragedia donde se vean involucradas unidades policíacas y conducidas por civiles ante el exceso de velocidad con que las primeas son conducidas a todas horas del día.
Esto hace pensar de que los operativos o bien son para tender llamados muy importantes y de auténtica emergencia donde la vida o muerte de alguna persona está en riesgo o que el crimen está imparable y esto hace que los agentes en su desesperación por ofrecer resultados se conduzcan de esta manera.
Lo anterior viene a cuento pues durante toda esta semana que pasó comerciantes y peatones por diferentes puntos de la ciudad comentan como convoyes de vehículos oficiales formados por tres o cuatro unidades se desplazan a velocidades francamente excesivas aun sean para atender un llamado de auxilio.
Esta situación se ve con mas frecuencia por el sector norte de la ciudad por el bulevar Aviación donde se ha visto como los patrulleros van como si fueran por una pista de carreras sin tomar en cuenta que es una rua muy transitada y en cualquier momento un loco o despistado puede atravesarse en su camino mas cuando la mayoría de las veces van solo con las torretas encendidas y las sirenas apagadas lo que aumente el riesgo sobre todo en las intersecciones donde existen altos de cortesía.
Algo deberían hacer los altos mandos para recomendar prudencia y atención a los conductores de las unidades pues por mas capacitados que estén para el manejo de las unidades en situaciones de riesgo ellos no están blindados contra el descuido de terceros o simplemente una falla mecánica que se presente y les haga perder el control de sus vehículos.
Caborca, Sonora.- La atención a llamadas para avisar de un ilícito o emergencia pueden llegar a ocasionar alguna tragedia donde se vean involucradas unidades policíacas y conducidas por civiles ante el exceso de velocidad con que las primeas son conducidas a todas horas del día.
Esto hace pensar de que los operativos o bien son para tender llamados muy importantes y de auténtica emergencia donde la vida o muerte de alguna persona está en riesgo o que el crimen está imparable y esto hace que los agentes en su desesperación por ofrecer resultados se conduzcan de esta manera.
Lo anterior viene a cuento pues durante toda esta semana que pasó comerciantes y peatones por diferentes puntos de la ciudad comentan como convoyes de vehículos oficiales formados por tres o cuatro unidades se desplazan a velocidades francamente excesivas aun sean para atender un llamado de auxilio.
Esta situación se ve con mas frecuencia por el sector norte de la ciudad por el bulevar Aviación donde se ha visto como los patrulleros van como si fueran por una pista de carreras sin tomar en cuenta que es una rua muy transitada y en cualquier momento un loco o despistado puede atravesarse en su camino mas cuando la mayoría de las veces van solo con las torretas encendidas y las sirenas apagadas lo que aumente el riesgo sobre todo en las intersecciones donde existen altos de cortesía.
Algo deberían hacer los altos mandos para recomendar prudencia y atención a los conductores de las unidades pues por mas capacitados que estén para el manejo de las unidades en situaciones de riesgo ellos no están blindados contra el descuido de terceros o simplemente una falla mecánica que se presente y les haga perder el control de sus vehículos.
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Se admiten, madrazos, chingadazos si son justos y merecedores. Quien este libre de pecado que tire el primero